Los Alcarrizos, ubicado en la provincia de Santo Domingo, República Dominicana, tiene una historia rica y multifacética que data del siglo XVIII. Su evolución desde un mercado de intercambio hasta convertirse en un municipio con una alta densidad poblacional es testimonio de su importancia en la historia económica, social y política del país.
Orígenes históricos y desarrollo temprano
En el siglo XVIII, Los Alcarrizos se destacó como un punto de intercambio comercial clave entre Santo Domingo y la región del Cibao. En lo que hoy es la entrada al municipio, operaba un mercado que se convirtió en un espacio de descanso para viajeros, sentando las bases para la formación de una comunidad. Este pequeño núcleo poblacional se fue consolidando con el paso de los años, estableciendo las bases de lo que más tarde sería un municipio dinámico.
La Rebelión de Los Alcarrizos (1824)
El 8 de marzo de 1824, los líderes de la conspiración de Los Alcarrizos fueron condenados a muerte por su lucha en contra de la ocupación haitiana y a favor del restablecimiento del dominio español en la parte oriental de la isla. Este movimiento, encabezado por Baltazar de Nova y Antonino González, reunió a patriotas decididos a desafiar el régimen haitiano en favor del Rey Fernando VII.
La conspiración, que tuvo su primera reunión el 24 de enero de 1824 en Los Alcarrizos, fue descubierta y reprimida con dureza por el Gobernador haitiano Jerome Maxime Borgellá, quien capturó a los principales implicados. Cuatro de ellos, Lázaro Núñez, José María de Altagracia, Facundo de Medina y Juan Jimenes, fueron ejecutados el 9 de marzo junto al Fuerte de San Gil. Antes de ser fusilado, Lázaro Núñez exclamó: "¡Dominicanos! ¡Nuestra muerte no debe ser inútil!", dejando un mensaje de esperanza y resistencia para las generaciones futuras.
Este trágico episodio demuestra el valor de los habitantes de Los Alcarrizos y su compromiso con la libertad, marcando un capítulo importante en la historia de la lucha dominicana por la soberanía.
Infraestructura y modernización
En 1910, durante el gobierno del presidente Ramón Cáceres, se inauguraron los primeros 18 kilómetros de carretera en el país, que conectaban el centro de Santo Domingo con Los Alcarrizos. Esto marcó el inicio de la Autopista Duarte, un eje vial esencial para el comercio y la comunicación entre la capital y otras regiones del país.
Además, en este período, la comunidad fue hogar del expresidente José Bordas Valdez, quien contribuyó significativamente a la alfabetización y educación de los residentes locales.
Actividades económicas en el siglo XX
En las primeras décadas del siglo XX, Los Alcarrizos fue un centro importante de ganadería y producción de caña de azúcar. La comunidad albergaba una vía férrea que conectaba los campos de caña con el ingenio azucarero de Haina. Aunque esta infraestructura ya no está en funcionamiento, dejó un impacto duradero en la economía y el desarrollo de la región.
El tren cañero de Los Alcarrizos fue parte de la historia de la región durante el auge de la industria azucarera en el siglo XX, particularmente entre las décadas de 1950 y 1980. El tren transportaba la caña de azúcar desde los campos hacia los ingenios, y su funcionamiento estaba vinculado a la expansión de la producción y la economía local. Si bien la fecha exacta del inicio de este servicio puede variar según las fuentes, es probable que el tren cañero haya operado principalmente entre mediados del siglo XX hasta que las nuevas formas de transporte y la modernización de la industria azucarera hicieron obsoletos estos sistemas.
Aunque el tren ya no circula, el legado que dejó sigue siendo una parte importante de la identidad histórica de Los Alcarrizos.
Expansión poblacional y proyectos urbanos
La población de Los Alcarrizos comenzó a expandirse significativamente en los años 70 y 80 debido a importantes proyectos urbanos impulsados por los gobiernos de la época. Bajo la presidencia de Joaquín Balaguer, se desarrollaron urbanizaciones como el sector de Sávica y los "Multis," que se convertirían en el núcleo de sectores como Pueblo Nuevo.
En 1979, tras el paso del huracán David, el gobierno de Antonio Guzmán Fernández construyó soluciones habitacionales, incluyendo los famosos barracones y proyectos de casas dúplex en colaboración con el Instituto Nacional de la Vivienda (INVI). Estos desarrollos atrajeron a una nueva ola de inmigrantes y consolidaron la expansión de la comunidad.
Elevación a municipio y crecimiento demográfico
Los Alcarrizos fue elevado a la categoría de municipio mediante la Ley 64-05 el 31 de enero de 2005. Sin embargo, su ayuntamiento fue formalmente establecido el 16 de agosto de 2006, con la juramentación de las primeras autoridades electas en las elecciones municipales de ese año.
Actualmente, Los Alcarrizos tiene una población de 272,772 habitantes, distribuidos en un territorio de 31 kilómetros cuadrados. Sin incluir los distritos municipales de Pantoja y Palmarejo Villa Linda, la población alcanza 206,557 habitantes, lo que equivale a una densidad de 6,492 personas por kilómetro cuadrado, destacándose como uno de los municipios más densamente poblados de la provincia Santo Domingo.
Aspectos culturales y comunitarios
La comunidad también tiene una fuerte tradición cultural y espiritual. La Iglesia San Antonio de Padua, fundada en el siglo XX y dirigida por el sacerdote Benito Arrieta, jugó un papel importante en el desarrollo social de la región. Además, Los Alcarrizos es conocido por su diversidad de barrios, muchos de los cuales surgieron como asentamientos espontáneos durante las décadas de 1970 y 1980 debido a la migración rural y los desalojos en áreas urbanas de Santo Domingo.
Proyectos habitacionales recientes
En las décadas de 1990 y 2000, se desarrollaron nuevos proyectos habitacionales, como Los Americanos y Canta La Rana, este último finalizado durante los gobiernos de Leonel Fernández e Hipólito Mejía. Estos proyectos han contribuido al crecimiento urbano y a la integración de las comunidades en el municipio.
La historia de Los Alcarrizos es un reflejo de resistencia, transformación y crecimiento. Desde sus orígenes como un mercado rural hasta convertirse en un municipio vibrante, la comunidad ha demostrado una notable capacidad de adaptación y desarrollo. Hoy, Los Alcarrizos continúa evolucionando, combinando su rica historia con su potencial para un futuro próspero.
Misión
Somos el gobierno local responsable del desarrollo municipal, que implementa acciones de ordenamiento y desarrollo territorial, inversión social, educación, participación y equidad de género; comprometido con el medio ambiente y la cultura, generando así, capital social.
Visión
Una gestión ejemplo nacional de buen gobierno local, comprometido con la transparencia, la solidaridad y el asociativismo como instrumento de desarrollo y cohesión social.
Valores
Transparencia
Participación
Productividad
Solidaridad
Compromiso